ENTREVISTA | Presidente de la RASD
Mohamed Abdelaziz en las dependecias presidenciales | R.Q.
- 'Marruecos chantajea mediante la inmigración y las ciudades de Ceuta y Melilla'
- 'La soberanía pertenece al pueblo saharui y es él quien debe decidir su destino'
- El 14 de abril se espera un nuevo informe del enviado especial de la ONU
Son ya 33 años los que llevan en campos de refugiados del desierto argelino. Más de tres décadas desde que, el 6 de noviembre de 1975, Marruecos se anexionase la antigua colonia española, forzando al exilio de Tinduf (Argelia) a miles de refugiados (125.000, según las organizaciones humanitarias).
"En 1991 -cuando se acordó el alto al fuego con Marruecos- dijimos al pueblo que en el plazo de un año se celebraría un referéndum de autodeterminación. Desde entonces han pasado 18 años y no hay indicios de que se vaya a llevar a cabo. Marruecos sigue violando los derechos humanos en el territorio ocupado y no hay una oposición internacional clara. Todo esto ha creado una profunda decepción en la población, sobre todo en los más jóvenes -partidarios en su mayoría de enfrentarse a Marruecos con las armas-", continúa Abdelaziz, quien es además secretario general del Frente Polisario, partido único y onmipresente en la RASD.
"En 2005 nació una intifada pacífica que está siendo reprimida de forma brutal por Marruecos, con agresiones a las personas y destrucción de sus bienes. Esto ha creado una situación que puede describirse como "un polvorín", la paciencia está llegando al límite y cada vez es más difícil contener a la población. El número de efectivos militares saharauis ha crecido notablemente desde 1991 -fecha del alto el fuego- . El Ejército tiene la moral bastante alta y está dispuesto a sacrificarse".
Abdelaziz suelta este discurso prebélico desde una de las salas del edificio presidencial que dirige la vida de los refugiados saharauis. Se encuentra en Rabouni, sede administrativa que se se sitúa a escasos kilómetros del primer campamento, el 27 de febrero, donde reside en una casa -mitad haima, mitad edificación de adobe- junto a su esposa, ministra de Cultura.
Ni una palabra sobre cuántos son, dónde están o cómo son esos supuestos efectivos militares.
'Confianza' en Naciones Unidas
Tras la advertencia, Abdelaziz da un paso atrás. Dice que "mientras sigan teniendo confianza en Naciones Unidas", se mantendrá la vía pacífica. Precisamente se espera para la semana que viene, el 14 de abril, un informe del nuevo enviado especial de la ONU, Christopher Ross. Todo apunta a que la situación seguirá como hasta ahora. Es decir, sin avances palpables. "No hay una fecha para una nueva ronda de negociaciones -sería ya la quinta-, pero nos parece un enviado especial serio, Creemos que lo único que impide que la negociación avance es la intransigencia de Marruecos", dice Abdelaziz.
En su opinión, "los indicios indican que el informe va a instar a las partes a seguir negociando, que abordará el tema de los derechos humanos en los territorios ocupados y las competencias de la Minurso -misión de Naciones Unidas para el Sáhara Occidental- para que vele por los derechos de los saharauis. Esperamos que también incluya una alusión al espolio de los recursos del país -ricas minas de fosfatos y bancos de pesca- y una prórroga para lo que queda de año para que Ross pueda serguir avanzando en las negociaciones".
"Nosotros, como Frente Polisario, estamos dispuestos a debatir todo aquello que pueda llevar a la paz. pero hay un concepto innegociable: la soberanía pertenece al pueblo saharui y es él quien debe decidir su destino". Ese ha sido siempre el principal escollo en las negociaciones. Y es que Marruecos no está por la labor de convocar un referéndum. El rey Mohamed V habla de regionalización y descentralización, pero niega la opción del voto.
Abdelaziz, que fue fundador del Frente Polisario y ocupa su cargo desde 1982, tiene también palabras de condena para España: "Estamos preocupados por la ambigüedad del actual Gobierno. España colonizó el Sáhara y tiene un responsabilidad". Se atreve incluso a aventurar las causas de esa "ambigüedad": "Marruecos chantajea mediante la inmigración y las ciudades de Ceuta y Melilla".
Abdelaziz repite con convicción sus argumentos. Dice que en estos 18 años se han dado pasos positivos para el Sáhara, que la situación avanza. Sin embargo, las condiciones en las que vive su población, disgregada por un inmenso desierto, no invitan al optimismo.
Raquel Quílez (Enviada especial) | Tinduf
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