El Consejo de seguridad no ata un pacto para ampliar la Minurso, cuya vigencia acaba hoy.
El Polisario exige que Naciones Unidas controle el respeto a los Derechos Humanos mientras Marruecos se niega.
efe - Viernes, 30 de Abril de 2010
Nueva York. Los países miembros del Consejo de Seguridad de la ONU trataban anoche de resolver mediante negociaciones informales sus diferencias sobre la ampliación por un año del mandato de la misión de la organización en el Sahara Occidental (Minurso). Fuentes diplomáticas dijeron ayer a Efe que el objetivo de esos contactos, que se prolongarán durante el día de hoy, es encontrar una fórmula de consenso para someter a votación un proyecto de resolución consensuado. De ser así, la fórmula sería votada por los quince miembros del Consejo probablemente hoy ya que es el día que vence el actual mandato de los cascos azules desplegados en la ex colonia española.
La falta de acuerdo obligó a posponer la reunión que tenía programada ayer el Consejo de Seguridad para autorizar la continuidad de la presencia de Naciones Unidas en el Sahara, adonde fue enviada en 1991 tras el alto el fuego declarado por Marruecos y el Frente Polisario.
Las diferencias que separan a los quince miembros del Consejo se centran en la exigencia del Polisario de que se incluya en la nueva resolución algún mecanismo de supervisión de la situación de los derechos humanos en el territorio ocupado por Marruecos, a lo que Rabat se opone tajantemente. El Grupo de Amigos del Sahara Occidental (Francia, EEUU, España, Reino Unido y Rusia) puso sobre la mesa del Consejo un proyecto de resolución en el que no se incluye la petición del Polisario, por considerar que sería contraproducente para los intentos de encontrar una solución negociada.
PROPUESTA DE MÉXICO Varios miembros no permanentes del máximo órgano son favorables a la propuesta de México de que la resolución inste a las partes a mantenerse en contacto con la oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, tanto para abordar la situación en el territorio como en los campos de refugiados de Tinduf.
El texto alternativo mexicano es visto por los países cercanos a la postura del Polisario como un compromiso aceptable, pese a que no incorpora la supervisión de los derechos humanos directamente al mandato de la Minurso, que era el deseo de los independentistas. En ese sentido, el Frente Polisario culpó el miércoles a Francia de impedir una mayor supervisión de la situación en el Sahara Occidental, por su deseo de evitar que se conozcan las supuestas violaciones de derechos humanos cometidas por las autoridades marroquíes.
Para Marruecos, la insistencia del Polisario en este asunto es una maniobra para obstaculizar las negociaciones sobre la soberanía auspiciadas por Naciones Unidas. El reino alauí sostiene que la única solución realista al conflicto es su propuesta de conceder la autonomía al territorio que ocupa.
La falta de acuerdo obligó a posponer la reunión que tenía programada ayer el Consejo de Seguridad para autorizar la continuidad de la presencia de Naciones Unidas en el Sahara, adonde fue enviada en 1991 tras el alto el fuego declarado por Marruecos y el Frente Polisario.
Las diferencias que separan a los quince miembros del Consejo se centran en la exigencia del Polisario de que se incluya en la nueva resolución algún mecanismo de supervisión de la situación de los derechos humanos en el territorio ocupado por Marruecos, a lo que Rabat se opone tajantemente. El Grupo de Amigos del Sahara Occidental (Francia, EEUU, España, Reino Unido y Rusia) puso sobre la mesa del Consejo un proyecto de resolución en el que no se incluye la petición del Polisario, por considerar que sería contraproducente para los intentos de encontrar una solución negociada.
PROPUESTA DE MÉXICO Varios miembros no permanentes del máximo órgano son favorables a la propuesta de México de que la resolución inste a las partes a mantenerse en contacto con la oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, tanto para abordar la situación en el territorio como en los campos de refugiados de Tinduf.
El texto alternativo mexicano es visto por los países cercanos a la postura del Polisario como un compromiso aceptable, pese a que no incorpora la supervisión de los derechos humanos directamente al mandato de la Minurso, que era el deseo de los independentistas. En ese sentido, el Frente Polisario culpó el miércoles a Francia de impedir una mayor supervisión de la situación en el Sahara Occidental, por su deseo de evitar que se conozcan las supuestas violaciones de derechos humanos cometidas por las autoridades marroquíes.
Para Marruecos, la insistencia del Polisario en este asunto es una maniobra para obstaculizar las negociaciones sobre la soberanía auspiciadas por Naciones Unidas. El reino alauí sostiene que la única solución realista al conflicto es su propuesta de conceder la autonomía al territorio que ocupa.
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